Los problemas de tener un coche parado mucho tiempo
Aunque parezca un contrasentido, un coche parado durante mucho tiempo puede acabar teniendo numerosos problemas mecánicos debidos, precisamente, a la falta de actividad. Estar mucho tiempo sin circular ocasiona a los automóviles desgastes tanto o más importantes que los ocasionados por su uso diario. Y es que es cierto que en marcha, todos los elementos están sujetos a desgaste, però las consecuencias de estar parado pueden ser incluso peores.
Si estamos interesados en un coche ya usado o en comprar un clásico para restaurarlo, es importante conocer las posibles averías que el tiempo causa sobre los coches inactivos y las piezas que vas a necesitar. A continuación os presentamos las piezas con más probabilidades de avería por falta de uso:
Los neumáticos
Un coche que permanezca mucho tiempo estacionado acabará deformando sus neumáticos por su propio peso y, además, es muy probable que tenga otros fallos mecánicos importantes. Si vas a tener tu coche parado durante una larga temporada, lo ideal es que lo dejes apoyado en unas borriquetas para que el peso no deforme los neumáticos. Si no es posible, lo mejor es que hinches las ruedas con 1,5 bar más de presión que la recomendada por el fabricante. Así, la cubierta no queda tan plana apoyada en el suelo y no se deforma tanto. De lo contrario, cuando salgas a rodar notarás vibraciones y ruidos en la dirección.
Aire acondicionado
Este elemento es particularmente crítico. Mucha gente apenas lo usa 4 o 5 días en verano; es un grave error, por un lado, porque es el método más eficaz para desempañar los cristales en invierno y, por otro, porque el sistema tiene elementos que precisan que circule el fluido refrigerado (el gas que enfría) para mantenerse lubricados. El compresor, el filtro y todas las juntas de estanqueidad requieren que pongamos en marcha el aire acondicionado al menos una vez al mes durante unos minutos para “estar en forma”.
Los elevalunas eléctricos
La mayor parte de las averías en los sistemas eléctricos de los elevalunas están originadas “por los extremos”: desgastes por su excesivo uso -el famoso caso del patín de plástico que se rompe y se cae la ventanilla de golpe- o problemas en el motor eléctrico por óxido debido a la falta de uso. En la caja que forma la puerta, donde va montado el motor del elevalunas, siempre hay humedad de la lluvia, etc. Si no se usa con frecuencia, el sistema se oxida y empiezan los fallos.
Motor
Necesita funcionar al menos, una vez al mes. Si lleva mucho tiempo sin girar, los aros de los pistones pueden haberse quedado pegados, lo que provocará una avería grave. El aceite también puede haber perdido sus propiedades.
Circuito de refrigeración
Los períodos de inactividad en motores refrigerados por agua pueden causar importantes averías en los manguitos, la bomba de agua, el termostato… Para evitar problemas, es recomendable un flushing (lavado interno y purgado) del circuito, así como una bomba de agua y un termostato nuevos.
Fugas de aceite
Los elementos que garantizan la estanqueidad del motor necesitan “hidratarse” mediante su contacto con aceite; si una mecánica está parada durante mucho tiempo, las juntas se resecan, se agrietan e incluso encogen, provocando fugas. Si al soltar el pedal del acelerador sale humo azul por el escape, mucho cuidado.
Distribución y “taqueteo”
Si al encender el coche se escucha un “taca-taca-taca” en la parte alta del motor, se debe esperar 5 minutos para que los taqués hidráulicos que accionan las válvulas vuelvan a cebarse y funcionen correctamente. ¿El ruido persiste? Uno de los taqués “ha muerto”… por falta de uso.
Sistema de frenos
El líquido de frenos debe cambiarse cada dos años, aunque el coche esté parado: se trata de un elemento que “absorbe” agua de la atmósfera, lo que provoca que el punto de ebullición aparezca antes (da origen al conocido “fadding”: las burbujas alargan el recorrido del pedal y puede dejar de frenar) y que se oxiden piezas que afectan al sistema.
Caja de cambios y diferenciales
Necesitan aceite para mantenerse lubricados: los largos períodos de inactividad hacen que se oxiden los piñones, sincronizadores, horquillas…
Bomba de agua, lavaparabrisas y faros
Si se acciona el lavaparabrisas y éste no echa agua, pero el depósito sí tiene líquido, lo más probable es que esté fallando e el motor que acciona la bomba, debido al óxido. Puede comprobarse mirando el fusible: se habrá fundido debido al elevado consumo eléctrico que genera un propulsor eléctrico cuando se agarrota.